Profecía y carisma

“La primera característica que singulariza la Obra Completa de Alfonso Comín es su interna unidad pese a abarcar un cuarto de siglo. Esto se debe principalmente a que, en contraste con otros tipos de recopilación de obra científica, filosófica o literaria, en los que la unidad la otorga el autor, la de Comín se basa en un hilo conducente que preside y engarza la diversidad, dotándola de dirección y sentido. Si nos fijamos bien, la obra completa de Comín es el relato —a veces casi novelado— de una trayectoria vital indisolublemente ligada al transcurrir de la sociedad política en la que nació, vivió y murió. Se trata, en puridad, de una extensa crónica personal y colectiva. Si, por un lado, puede considerarse una autobiografía profunda, por otro es la historia de un pueblo, cuyos grandes protagonistas son los combatientes por la democracia, el movimiento obrero y los grupos renovadores de la Iglesia militante: actores colectivos de un drama en el que Alfonso Comín participó como observador extremadamente atento y como agonista intensamente activo. Es este doble carácter de observación participante y de combate lo que concede una segunda singularidad a su Obra Completa. Ella misma es un instrumento de lucha por los ideales políticos y religiosos que le impulsaron en su práctica pública y cotidiana y se inscribe, como una más aunque básica, en las actividades de la Fundación.”(…)